vv.1 • • • 5 • • • • 10 • • • • 15 • • • • 20 • •
Gn 8:1 Entonces se acordó Dios de Noé y de todos los animales y de todos los ganados que estaban con él en el arca; e hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y menguaron las aguas.
Gn 8:2 Se cerraron los manantiales del abismo y las ventanas de los cielos; y la lluvia de los cielos fue detenida.
Gn 8:3 Las aguas decrecían gradualmente de sobre la tierra. Así que, las aguas comenzaron a disminuir al cabo de ciento cincuenta días.
Gn 8:4 Y reposó el arca en el mes séptimo, a los diecisiete días del mes, sobre los montes de Ararat.
Gn 8:5 Las aguas disminuyeron gradualmente hasta el mes décimo; en el mes décimo, el primer día del mes, se vieron las cimas de los montes.
Gn 8:6 Al cabo de cuarenta días, abrió Noé la ventana del arca que había hecho
Gn 8:7 y envió un cuervo, el cual salió y voló de un lado a otro hasta que las aguas se secaron sobre la tierra.
Gn 8:8 Luego envió de sí una paloma para ver si las aguas se habían retirado de la faz de la tierra.
Gn 8:9 Pero no encontró la paloma donde posar la planta de su pie, así que volvió a Noé al arca, porque las aguas estaban aún sobre la faz de toda la tierra. Y él extendió su mano, la tomó y la hizo entrar consigo en el arca.
Gn 8:10 Esperó aún otros siete días, y volvió a enviar la paloma fuera del arca.
Gn 8:11 Y la paloma volvió a él a la hora de la tarde, y traía en el pico una hoja de olivo recién arrancada. Comprendió, pues, Noé que las aguas se habían retirado de sobre la tierra.
Gn 8:12 Esperó aún otros siete días y envió la paloma, la cual no volvió más a él.
Gn 8:13 En el año seiscientos uno, en el mes primero, el primer día del mes, las aguas se secaron sobre la tierra; y quitó Noé la cubierta del arca, miró y he aquí que la faz de la tierra estaba seca.
Gn 8:14 En el mes segundo, a los veintisiete días del mes, la tierra estaba seca.
Gn 8:15 Entonces habló Dios a Noé, diciendo:
Gn 8:16 Sal del arca tú, y contigo tu mujer, tus hijos y las mujeres de tus hijos.
Gn 8:17 Saca contigo todos los seres vivos de toda carne que te acompaña —aves, ganados y todo animal que se arrastra sobre la tierra— para que pululen sobre la tierra y fructifiquen y se multipliquen sobre la tierra.
Gn 8:18 Salió, pues, Noé, y con él sus hijos, su mujer y las mujeres de sus hijos.
Gn 8:19 Todo animal, todo lo que se arrastra y toda ave, todo lo que se mueve sobre la tierra, salió del arca según sus familias.
Gn 8:20 Luego construyó Noé un altar a Jehová y, tomando de toda bestia limpia y de toda ave limpia, ofreció holocaustos en el altar.
Gn 8:21 Y Jehová percibió un aroma que le satisfacía; y dijo Jehová en Su corazón: No volveré jamás a maldecir la tierra por causa del hombre, porque la imaginación del corazón del hombre es maligna desde su juventud; ni volveré a destruir todo ser vivo como he hecho.
Gn 8:22 Mientras la tierra permanezca, / no cesarán / la siembra y la siega, el frío y el calor, / el verano y el invierno, y el día y la noche.
© 2022 Living Stream Ministry
Todos los derechos reservados